1. "Alegria, alegria". Probablemente la primera canción de Caetano de la que tenga constancia, porque fue sintonía de un programa de Radio 3 en los 80 y se me quedó en el inconsciente desde entonces. Precursora de la tropicália y tan pop como un cuadro del bote de sopa Campbell...
...participó en un festival de la canción de 1967, donde Caetano se acompañó de la banda de rocanrol argentina Beat Boys. En plena dictadura militar brasileña, esta marchinha de carnaval psicodélica fue tan atrevida que recibió palos a derecha (la frase "sem lenço, sem documento" se tomó como una mención solapada al LSD; nótese las iniciales) e izquierda (la progresía del "yanqui go home" se soliviantó porque la canción menciona la Coca Cola). Como decía aquel, "ladran, luego cabalgamos".
2. "Terra". Caetano y su compañero de tropicália Gilberto Gil son apresados, y más tarde exiliados, coincidiendo con un endurecimiento de la dictadura militar. Era 1969, and Whitey's on the moon. Las fotografías de la Tierra desde la luna que vio Caetano en una revista en la cárcel le llevan a componer una de sus canciones más memorables, que apareció en un disco nueve años después; la última estrofa es la de "Você já foi à Bahia?" de Dorival Caymmi, tal cual.
3. "O leãozinho". Esta canción engaña, especialmente habida cuenta de que existe una versión con Xuxa, la de las canciones para niños: no habla de un leoncito chiquitito, sino de un humano macho de signo zodiacal Leo como él. En su libro de memorias, "Verdad tropical", Caetano menciona (bastante de pasada) un chico muy guapo que tocaba el bajo y a quien dedicó esta preciosidad de canción. En un apéndice a un libro de 2003 con letras de sus canciones, revela que el "leãozinho" en cuestión es Dadi Carvalho, bajista de Os Novos Baianos y que luego tocó con otros artistas, incluido el mismo Caetano.
4. "Um canto de afoxé para o bloco do Ilê". Caetano ha homenajeado en varias canciones al carnaval de Salvador de Bahía y los blocos afros (las peñas del carnaval, salvando las distancias; el más famoso es Olodum). Esta es otra monadita de canción, dedicada al bloco afro más antiguo, Ilê Aiyê; el niño que participa (y compone) es el hijo mayor de Caetano, Moreno Veloso, también músico y artífice de la poliédrica trilogía "+2" junto con Domenico Lancelotti y Alexandre Kassin.
5. "Língua". El rap se une a Pessoa ("A minha pátria é a língua portuguesa") en este himno al idioma portugués. Le acompaña la exuberante Elza Soares. Aquí, en el programa de Chacrinha, figura televisiva de quien Caetano tomó prestada su muletilla "alegría, alegría" para el título de la canción ya citada, y que quedó inmortalizada por Gilberto Gil en "Aquele abraço", que escribió antes de su exilio.
6. "Desde que o samba é samba". De uno de sus discos en colaboración (con Gil), que se llama "Tropicália 2" (1993), pero es más clásico y menos rompedor que el disco-manifiesto tropicalista de 25 años antes. En el verano de 1994 lo presentaron en un memorable concierto en el Poble Espanyol, con Djavan como telonero. Dejando de lado la desvitaminización que le perpetran a Hendrix, reivindican a Jõao Gilberto en temas tan bellos como este (que, a su vez, versioneó el octogenario inventor de la "batida bossa nova").
7. "Eu sei que vou te amar". No hay brasileño que no haya versioneado a sus compatriotas, y Caetano no es una excepción: ha cantado piezas de Ary Barroso, Noel Rosa, Chico Buarque, Pixinguinha, Dorival Caymmi, Roberto Carlos, etc etc. Aquí un tema de Vinicius de Moraes y Tom Jobim a base de guitarra y voz, como buen joaõgilbertiano que es.
8. "Rumba azul". También ha hecho discos de versiones. Uno de canciones norteamericanas, de resultado irregular: vuelve a desmineralizar el rock (Dylan, Nirvana), con mejor fortuna en los standards de jazz (esa versión a capella de "Love for Sale" tan acorde con su letra). Y otro de canciones latinoamericanas, más logrado (al igual que otros ejemplos en otros discos como el "Tú me acostumbraste" de su álbum rarito con portada pelín narcisista)...
...y probablemente el mayor hit de Caetano en España debido a que dos de los temas ("Tonada de luna llena" y "Cucurrucucú paloma") fueron a parar a sendas películas de Pedro Almodóvar. El disco se abre con este tema de Armando Oréfiche, el director de la orquesta Lecuona Cuban Boys:
9. "Não enche". Del disco que coincidió con la aparición de "Verdad tropical" en 1997, y que, no casualmente, se llama "Livro". En él hay un tema que conocimos por Marisa Monte, otro de Ary Barroso, otro de Moreno, un tributo a los cantantes brasileños (incluida su hermana pequeña, Maria Bethânia, cuyo nombre sacó el niño Caetano de una canción) y particularmente a João Gilberto ("melhor do que o silêncio, só João") al final del disco, y en todo ello, una constatación de que la sombra de la tropicália es alargada y que quien tuvo, retuvo. En esta reescritura de "Se manda" de Jorge Ben, popifica la samba de Bahía (o sambifica el pop, que tanto monta).
10. La canción que da nombre a este post. Es un homenaje de una caetanera, Adriana Calcanhotto, y aparece en un disco que comienza con una canción dedicada al "parangolé Pamplona" del mismo Hélio Oiticica cuya instalación "Tropicália" dio nombre al movimiento (y grandísima parte de cuya obra se destruyó en un incendio en 2009). Adriana lleva el parangolé en la portada del disco; aquí lo luce Caetano.
Y aquí la obra "Tropicália".
El título viene de otra canción de Caetano con Luiz Melodia y viene al pelo en relación con la idea tropicalista (tomada a su vez del "Manifesto Antropófago" del escritor modernista brasileño Oswald de Andrade, publicado en 1928) de comer las influencias externas, mezclarlas con la cultura brasileña y regurgitarlas en una forma nueva. La canción de Adriana está hecha de sampleados de canciones de Caetano.
Aquí el banquete: "vamos a comerlo crudo", canta Adriana. Que aproveche.
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