sábado, 10 de abril de 2010

Otro que empieza a criar malvas...

...Malcolm McLaren, que fuera manager primero de The New York Dolls, aquella banda que pretendiendo ir de Stones acabó como protopunks con todas sus consecuencias: el guitarrista, Johnny Thunders, parecía que se creía más Keith Richards que Keith Richards, también con todas sus consecuencias: Thunders devino el paradigma de yonqui irredento recalcitrante dejando al mismísimo Keef Riff Hard como un simple aficionado. Y así le fue: Juanito Truenos las palmó supuestamente de sobredosis de metadona en su cuarto de un hotel de Nueva Orleans; Keith, tras su caída del cocotero, suelta su boutade de la esnifada de las cenizas de su propio padre, hace una campaña de fotos para Vuitton, y escribe una autobiografía que aparecerá en octubre; es decir, vive.

Aquí Thunders and company, que andábamos con su recién fiambreado ex-manager:



...el cual pasó a serlo de los Sex Pistols. Aparte de ser manager, tenía una tienda de ropa en Londres con su novia, la diseñadora de moda Vivienne Westwood, cuyo 69 cumpleaños fue ayer y cuyo perfume, Boudoir, aparece mencionado en un curiosísimo artículo del Guardian (zorry, in English) sobre los olores de los perfumes: hay quien lo describe como "olor a bragas sin las bragas". En 1975 la tienda se llamaba Sex y llevaba arreos sadomaso. Allí se juntaba gente que andaba en bandas: una de ellas fue el germen de los Sex Pistols, nombre que decidieron una vez hubo entrado un tal John Lydon cuyos colegas de banda empezaron a llamarle "Johnny Rotten" por su escasa higiene dental. El recién fallecido era muy cuco y, el mismo día de la ceremonia del 25 aniversario de la coronación de la reina Isabel de Inglaterra alias conejito de Duracell (que sigue y sigue), monta un pollo en barco con los Sex Pistols por el Támesis con consiguiente arresto de la banda (que ya contaba con Sid Vicious aporreando el bajo; la rubia de pelo rizado y labios rojos que se ve es su novia, Nancy Spungen, a la que luego mató).



Tras este histórico evento, se van a América de gira, y de ahí al carajo y bronca con McLaren por temas de pelas (McLaren tiene fama de tacaño; Johnny "we're in it for the money" Rotten gana el juicio), y se mata Sid Vicious, venga fiambre, y mientras tanto, McLaren decide grabar discos él mismo y le sale tal que la barbacoa la barbequiú con toque de rumba congoleña y mucho saltito a la cuerda:



También fue el manager de Bow Wow Wow, aquella banda cuyo primer single salió en cassette e incitaba a la gente a grabar música en cassettes... lo que ahora se llamaría piratería; ya los mencioné en un post...

...nada, que me pongo manriqueña: empiezo con Diego y termino con Jorge: "Nuestras vidas son los ríos..."

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