miércoles, 27 de febrero de 2013

Piratas, que somos unos piratas

La Federación Internacional de la Industria Discográfica achaca el incremento de sólo un 4% en las ventas de música digital en España (la media europea es 9% de incremento) a que pirateamos y pirateamos por mucha ley Sinde que nos pongan.



Yo pirateo, tú pirateas, él piratea...



...y todos los demás pirateamos, también libros: ¡y leemos mucho! (Oh là là, c'est incroyable!)



No sólo pirateamos, que tampoco somos tan piratas: también usamos el streaming legal. Que, por cierto, Spotify no parece ser precisamente un negocio redondo, ni para la empresa ni para los músicos. Pero ahí sigue.



Y también hay quien compra discos o música digital. Por lo que a cierta antigua compradora compulsiva de discos respecta, el último disco que he comprado venía con el Rockdelux. Por lo demás, radio, streaming, YouTube, podcasts, y pirateo como pirateaba cuando me grababa de la radio las cassettes que luego amenizaban las merendolas de principios de carrera en Burgos, con hits como la de sin dinero ya no hay rocanrol, otras de la movida, y Víctor Manuel y Ana Belén: glups, desliz de juventud.

Qué caraja: esta de la carrera en Salamanca la sigo recordando con mucho cariño.



También había algún hit en inglés en las merendolas.



Eso, cuando la radio y el cassette; ahora es la radio, el YouTube y el Spotify.

Aquí otro hit de merendola. Esto era yo. Pero al lado podría haber estado Ana Belén destrozando el ô balancê balancê. Que también era yo. Todo grabado de la radio en una cinta cassette.



La Federación Internacional de la Industria Discográfica también nos informa de los discos más vendidos de 2012. El último de Adele sigue arrasando con la pana; el single más vendido "no" fue el "Gangnam Style" y "sí" lo hubiera llevado en una cinta cassette grabada de la radio a una hipotética merendola 2012.



PD Días más tarde, me acabo de acordar de una que grabé de la radio y no he oído desde los tiempos de las merendolas y la aparición del cassette en mi vida: el curso 1980-81, primero de carrera. (No, no hubo cassette en casa hasta entonces, pero sí hubo tocadiscos.) La canción en cuestión fue el único hit de una one hit wonder de entonces.



martes, 26 de febrero de 2013

Ya que estamos de Oscars...

...resulta que la que ha ganado el Oscar a mejor documental es la misma que la que ganó el premio internacional del último In-Edit.

No estaba entre las que tenía en lista y no la vi hasta el otro día, que la acababan de estrenar en los cines normales. Tampoco me impresionó tanto como, por poner un ejemplo de otra de la familia "¿Qué fue de...?", "Last Days Here". Ahora bien, cualquier intento de contar la película sin spoilers es vano: incluso decir que la película va de un chicano de Detroit llamado Rodríguez que saca dos discos a principios de los 70 y no se come un colín en su tierra (la discográfica, sencillamente, le borra por falta de ventas), pero que de una manera misteriosa y con mucho misterio acaba siendo en Sudáfrica una leyenda a la altura de Elvis y un símbolo de la lucha anti-apartheid en plena efervescencia del régimen del apartheid (que, predeciblemente, prohibió los discos de Rodríguez, lo cual, predeciblemente, le dio más atractivo entre la juventud sudafricana anti-apartheid, blanca y negra)...

...y mientras tanto, Rodríguez no tenía ni la más mínima idea de todo ello, por lo que parece...

(aquí la portada del primero y el megahit sudafricano prohibido en las emisoras del país)



...decía, incluso decir que la película cuenta esa historia tan llena de misterio y que la cuenta como si fuera una de detectives es un spoiler.

Desde luego, el trailer es un fucking spoiler. Si le interesa la película a alguien, aunque sea porque ha ganado el Oscar, que no lo vea.



También están poniendo en los cines la que ganó el premio nacional del último In-Edit, que sí tenía en lista y no pude ver entonces: la de la banda de jazz de Sant Andreu, dirigida, la banda, por Joan Chamorro, saxofonista y profe en el Taller de Músics, que se montó una big band con chavales de 7 a 17 años. La película no explica cómo surgió la idea ni cómo se materializó, lo cual me ha faltado; más bien, se dedica a mostrar un poco el día a día de los ensayos para un concierto en el Palau de la Música: la nena de 7 años tocando una melodía con la trompeta

(y aquí la nena con su hermana de 10 y las otras pequeñas, haciendo su show de Sant Jordi en la tele barcelonesa con Chamorro a la, digamos, batuta)



(me quedo con las ganas de saber lo que Magalí escucha en casa.)

o la mama de las nenas lavando la trompeta en la ducha, o el Chamorro corrigiendo a cada uno de los chavales, o los chavales haciendo el gamba en la piscina como corresponde a su condición de chavales, y alguna imagen de un concierto en La Mercè in the rain, mecachis la Laia...

(una imagen del mismo concierto de La Mercè con la nena de 10 cantando y trompeteando)



y total, para hacer un showcito con unos músicos de jazz en esa salita de chichiná, el Palau de la Música...



Muy buena la banda, muy bueno el Chamorro, qué paciencia que tiene, qué caña les da y qué entusiasmo que le echa. Todo un proyecto, la Sant Andreu Jazz Band.

Aquí el trailer de la peli.



Y cae también una oscarizable (y oscarizada) no musical pero cuya banda sonora es otra tarantinada infernal. Mención especial para Jim Croce, cantautor folk blanco de origen italiano que en el spaghetti Chicago Pizza Pie western le pone la voz a la conciencia de Django como hombre libre: "tengo un nombre". Lo cual me chirría un poco, la verdad, habiendo tanto tema reivindicativo compuesto por negros, pero luego aparece una mezcla de James Brown y 2Pac; por lo demás, la película es como un tebeo y te ríes mucho, especialmente con el oscarizado como mejor actor secundario.

Y la canción es muy bonita. Más casualidades: Este año hará los consabidos 40 años de la publicación de la canción y posterior accidente de aviación que mató a Jim Croce.



¿Casualidad también que encontremos cierto coñazo de Beethoven (interpretado al arpa, para variar) en cierta escenita de la peli del musiquero Tarantino...



...y dicho coñazo reconvertido en cumbia amazónica en la próxima almodovarada del musiquero Almodóvar?



(I'm so excited, como se llama la almodovarada en inglés...)





PD Y la de Johnny Cash tocando en la cárcel de Folsom con subtítulos en sueco. Lo mejor, la música (el resto es hagiografía con los hijos que todo son flores para el papi). Decir que Johnny Cash es uno de los mejores cuentacuentos o cuentahistorias de la música popular americana, con una serie de canciones sobre la vida en la cárcel en particular, no es ningún spoiler.

Este videoclip es de la peli, de hecho:



martes, 19 de febrero de 2013

Quando ouvi Salif Keita, dancei...



Acabo de venir del concierto de Salif Keita en Barcelona, y fue de bailar y no parar: hasta hubo espontáneos africanos bailando en el escenario, que siempre son un espectáculo.

No sólo es que venga con un disco tan bailable que hasta te encuentras con lo que parece un sampleado de ¡los B-52!...





...sino que viene con posiblemente la banda más funky del planeta (Tierra) a este lado de Earth Wind and Fire. Y se nos llega a poner disco-chochi y todo, el Salif Keita.

Aquí un tema en directo con su banda (y una chica más que en Barcelona; la chica del concierto de Barcelona también era un espectáculo).



miércoles, 13 de febrero de 2013

Una buena noticia

Entre los recortes, el paro y la corrupción, por fin hay una buena noticia: que los ciudadanos todavía tenemos capacidad de influir de otras maneras además de votando en las elecciones.

Yes we can, que decía uno. Power to the people, que decía otro.







martes, 12 de febrero de 2013

Grammys 2013 (y el papa lo deja)

Ay Justin Timberlake. Quién te ha visto y quién te ve.



Aparte de la vuelta de Justin (no iba a hacer otro "Justified", obviamente, pero esto ya se pasa de sacarina), los supergrammificados de este año han sido los Black Keys. Que no son exactamente santo de mi devoción, la verdad, pero es un cambio con respecto a las Beyoncés, Alicia Keys y Adeles de otros años: hacen una música de un género que no se prodiga en el mainstream (que por algo se llama indie). Lo cual está muy bien: esto es como los discos dedicados y los 40 principales circa 1975, donde lo que gusta al público y lo que gusta a la crítica se encuentran en un mismo lugar.

Igualmente, no me gustan los Black Keys. Será que no tengo ni idea.



Un disco que sí me gusta, el "Channel Orange" de Frank Ocean, también ha recibido su Grammy. También anda el del tornado en la colaboración hip-hop que ganó su correspondiente estatuilla.



Pero la canción del tornado, una de las nominadas a "record of the year", pierde ante una que, bueno, muy indie muy mona pero encuentro que es una versión de Sting sin nervio, y no es una tautología: Sting estaba en los Police, una banda con más que mucho aquel. Será que no tengo ni idea.





Peor me lo pone la "song of the year". En la edición de los Grammys donde la organización da un puñetazo en la mesa y decide que ya está bien de tanta piel al descubierto...



...la "song of the year" es una que se puede leer como una glamourización de las drogas recreativas (un tanto similar a aquello de "y cuando me llene el cuerpo de anfetas y de alcohol" sin la gracia de la canción de Sabino Méndez).



Por lo demás, la "song of the year" tiene un gancho (el estribillo), tiene a Janelle (más nominalmente que otra cosa), y ya vale. Los intérpretes tienen otro Grammy como "best new artist". (Oh, really?)



Pero la supernoticia de hoy es que abandona un papa por primera vez desde hace 600 años. Una noticia asaz sorprendente, especialmente en un país donde no dimite ni Dios.

Al menos, el futuro ciudadano Ratzinger puede decir que ha congregado más jóvenes que cualquier festival pop.



PD Y el Sónar deja el CCCB / Macba y lo trasladan a la Fira. Ay.

lunes, 11 de febrero de 2013

¡Carnaval!

Es carnaval, y algunos carnavales, además de disfrazómanos, son musiqueros. El de Cádiz gasta guasa gaditana con temas de actualidad. Aquí la chirigota que ganó este año.



En Tenerife no se quedan cortos. Aquí la murga ganadora de este año.



Pero, con permiso de estos y otros carnavales musiqueros como el de Barranquilla...



...los carnavales musiqueros más famosos son, indudablemente, los de Brasil.





Y aquí un par de clásicos brasileños. ¡Feliz carnaval!





PD Cómo es posible olvidarme del carnaval de una de las ciudades más musiqueras del mundo mundial, Nueva Orleans. Una ciudad que, de tan musiquera, es de post monográfico.





sábado, 9 de febrero de 2013

Tangentopoli cañí

Suma y sigue. "The Economist", publicación que no se destaca precisamente por su ideología radical de ultraizquierdas, escribe un artículo sobre la corrupción en España. El artículo empieza así:
A CHORIZO is a spicy Spanish sausage, best accompanied by a glass of Rioja, though often sliced and served in a doughy bocadillo, or sandwich. Chorizo is also slang for a swindler or cheat. At protests against Mariano Rajoy’s government demonstrators have taken to waving loaves aloft and shouting: “There isn’t enough bread for so many chorizos!”
Y a base de chorizos se está potenciando la famosa "marca España" internacionalmente. Muy bonito.



Esa era la de cal. La de arena es que el juez ha embargado la "chabolita" de los Urdangarin de Borbón en Pedralbes.



Bueno, no la chabolita, sino "media" chabolita: la parte de él. Ella no tiene parte en el embrollo... y nosotros nos lo creemos.

El día que la justicia tenga el poder de imputar a cualquiera, ya sea el vecino, la infanta, el rey o el papa, será histórico. Y que conste que no me parece que la república sea la panacea (pregúntenselo a los italianos, o a los argentinos, o a los mexicanos...). Especialmente con tanto choricismo reinante.

Mientras tanto, más de un millón de personas pide la dimisión de la cúpula del PP por estar envueltos en tramas de corrupción. Pero, dice Mariano, todo es falso menos alguna cosa...

País.



viernes, 8 de febrero de 2013

Flechazos musicales de la semana (etc.)

Empiezo por lo que me acabo de encontrar: el último disco de Nick Cave con los Bad Seeds, que está a punto de salir. Un disco contenido a la par que atmosférico e inconfundiblemente nickcaveano. A pesar de que la segunda canción del disco me recuerda como que bastante mucho a aquella que hace poco asocié con Hendrix en Monterey...



...el disco me encanta. En concreto, hay unos cuantos temas que han sido amor a primera escucha. Este es uno.



Viene al Primavera. Está carito, el Primavera, pero me asalta la tentación de ir este año, con eso de que no hay dos sin tres, a la tercera va la vencida y tal vez el curso que viene no esté en Barcelona...

...pero en fin, que iba de flechazos musicales de la semana.

Como esta canción, que abre el aclamadísimo último disco de Fiona Apple. El álbum en sí no es que me enamorara a primera escucha como el de Nick Cave, pero oí esta canción por primera vez hace nada y es de estas que te dejan embobada y pendiente de cada nota y ahí queda, pegada en la memoria como una lapa.



Y ya que he mencionado al impepinable del careto que sustituye al mío, encuentro lo que se supone es su primera aparición en la tele, de antes de que firmara como "Jimi". Era 1965, andaba en los Upsetters, la banda de Little Richard, y aquí no acompañaban a Little Richard sino a unos tales Buddy and Stacey. La canción es una horteradita de la era de cuando América era la tierra de las mil danzas...

(por cierto: la versión original no es la de Wilson Pickett, sino esta)



(por cierto: la primera versión con el "na, nanananá" la hizo una banda chicana: el estribillo de marras surgió en un feliz momento en que se le olvidó la letra al cantante)



...y, volviendo a la primera aparición televisiva del impepinable, Buddy and Stacey hacían una coreografía graciosísima. Hay quien la compara con... ¡la Macarena!.

Qué le vamos a hacer: soy una hortera.



¡Viernes!


De Jalisco, nada...



A celebrarlo, con o sin conga, aquí, en Jaruco o en Jalisco.















miércoles, 6 de febrero de 2013

Oh mon Dieu, Mme Sarko! (Serait-ce possible, alors?)

Carla Bruni, Madame de Sarkozy, ex-modelo, ex-groupie de postín, ex-première dame de la France y por ahora one-hit wonder por gentileza de Nescafé...





...se va con el monsieur son mari l'ex-président de la république française a London England, según se comenta, por la misma razón que Depardieu de repente se nos hace ruso.

Exile on Main Street.

Tal vez sea porque, de ser así, Mr et Mme Sarko compartirían condición de, digamos, "exiliados fiscales" forrados de pela con los Stones en los 70 (unos, de Gran Bretaña a Francia; otros, viceversa), o vete tú a saber; el caso es que la ex-Brunísima acaba de sacar el avance de su primer disco tras su salida del Elíseo.

En el cual avance se imagina "en casa de Keith y Anita". No hacen falta apellidos.

Con estas nos sale, la ex de Mick y ex-première dame. Sacré nom d'une pipe en bois, como dice uno por ahí.



Wild thing

Murió Reg Presley, que de joven trabajaba de albañil y cantaba en una banda de rocanrol llamada the Troggs: lo de llamarse Presley fue idea del manager.

Los Troggs (los Trogloditas mucho antes de los Trogloditas) son los que en los 60 dieron al mundo la versión original de la canción tan empalagosamente azucarada de "Four Weddings and a Funeral", que es absolutamente horrenda. Con lo bonita que es la original de los Troggs.



La versión de REM, con tres cuartos de los cuales los Troggs grabaron años más tarde (este tema pasa lista a éxitos pasados)...



...la versión de REM, decía, era bastante más afortunada.



Pero una, que tiene cierta debilidad por los temas vacaburras trogloditas, entró en los Troggs por el tema vacaburra troglodita que también dieron al mundo...



...y que, a su vez, fue el tema con el que irrumpió Jimi Hendrix en el mundo literalmente como un burning ring of fire, que diría Johnny Cash, y dejémonos de hey Joes. Aquí va "esa" versión.



Pues resulta que el único número uno de los Troggs en su país, Gran Bretaña, no fue ni la canción azucarada ni la canción vacaburra. Fue esta, una de las canciones de aquel disco favorito de mi adolescencia, "Explosión 60".



Y aquí otros hits trogloditas. RIP.





sábado, 2 de febrero de 2013

Epifanía

Estoy en el centro comercial dispuesta a hacer la compra semanal. Como quien no quiere la cosa, me llevan los pies a la sección de libros de la FNAC. Encuentro un libro que acaba de publicar Diego Manrique, del cual, para variar, no tenía ni idea. Hojeándolo, me llega una canción a mis oídos. Me quedo pasmada.

No es posible, pienso.

Me acerco a la sección de música, no dando crédito a lo que estoy oyendo. Parece, será, no será, tiene pinta de ser.

Efectivamente, es.

Una canción de Nick Drake en el centro comercial.

Me quedo parada como una boba, el libro en una mano, el carrito de la compra en la otra, sin apenas percatarme de si los discos que hay en los estantes son de Patti Smith o de Justin Bieber. Estoy atrapada por la belleza melancólica de la música de Nick.



Acaba la canción y ahí sigo, parada como una boba. Comienza otra, donde Nick canta sobre el sol del sábado. Es sábado, y el sol se vislumbra entre nubes. Me va llegando una conciencia de quién soy y dónde estoy, pero no acabo de volver en mí. Camino sin rumbo por la sección de música, el libro en una mano, el carrito de la compra en la otra, Nick hablándome con su triste dulzura. En el centro comercial.

Probablemente uno de los lugares más absurdos donde se me pueda aparecer Nick Drake.



Y después de esto, acaba la música. Despierto. La rutina y el Mercadona me llaman.

Eran las últimas canciones del primer disco de Nick. Que se llama "Five Leaves Left", en referencia a la misma "hoja roja" que da título a un libro de Miguel Delibes. Por entonces, Nick era, y siguió siendo, un fumador empedernido de porros.


Se me antoja que la canción que me dejó parada en el centro comercial podría ser una premonición sobre el propio Nick. Era a la música lo que Van Gogh a la pintura: no se comieron un colín en vida pero terminaron siendo unos clásicos tras su muerte.


En el caso de Nick, su música fue a parar a bandas sonoras de películas americanas. Esta es de "Garden State"...



...y esta otra es de "Serendipity". Probablemente, esta es la canción más famosa de Nick. En ella, aparece John Cale el ex-Velvet tocando el piano, el órgano y la celesta.



Por cierto, los Planetas la versionearon en español.



Estas son canciones del siguiente disco de Nick, cuyo título puede aludir a nuestros tiempos de crisis: brighter, later. La luz, al final del túnel. Pero el later de Nick no fue brighter. Por mucho potencial como hits populares que tuvieran sus canciones incluso en su tiempo, los primeros 70 (con cantautores como James Taylor, o Joni Mitchell, o incluso la carne de radiofórmula Don McLean), Nick pasaba total de los condicionamientos de la fama y el éxito, empezando por tener que tocar en directo; sufría de depresión, estaba bajo tratamiento psiquiátrico, dejó la música tras el tercer álbum, volvió a casa de sus padres, y llegó a hacer un conato de cuarto álbum poco antes de que se matara a pastillas a la edad de 26 años.

Y después, la reivindicación a través de fans célebres como Elton John, que ya hizo apostolado de él cuando vivía. O como Robert Smith, quien, según se cuenta, puso a su banda The Cure por la letra de la canción que abre "Five Leaves Left":



Sin embargo, por mucho que le hayan utilizado hasta para anunciar coches...



...es significativo que, en este país del "Bruce Esprin... como se llame", fueran los Planetas y no La Oreja o el Alborán quienes le versionearan, o que fuera Russian Red quien le haya nombrado en el título de una canción: al contrario que el archipopularísimo Van Gogh, dudo que el nombre "Nick Drake" siquiera suene a la gente que no sea los raritos hipsters de turno. Y entre los raritos hipsters de turno, Nick Drake es lo más, como la Velvet o los Cure, ya que los hemos mencionado.

Por eso, porque es un icono hipster, no me podía creer lo de esta mañana. Aquí otra del "Five Leaves Left" que también me puede dejar parada como una boba si la oigo por ahí.



viernes, 1 de febrero de 2013

¿Alguna vez dije que estaba out?

Siguiendo con revistas (no las de noticias, donde domina la ristra de chorizos del país, también fuera de nuestras fronteras, para mayor vergüenza ajena), sale Salif Keita en el Rockdelux de este mes. Dice que su último disco es realmente el último. ¿El motivo? Las descargas gratuitas por internet: "yo tengo una familia que mantener y así, gratis, un artista no puede continuar". Un signo de los tiempos.



Pero lo que termino encontrando en el Rockdelux es lo rematadamente out que estoy también en cuanto a música brasileña, uno de los grandes amores musicales de mi vida. No conozco gran cosa sobre lo que se hace últimamente en Brasil aparte de lo que llega del Gusttavo Lima y assim você me mata. Y Gaby Amarantos. I prou. Este es un hit entre los abueletes marchosos de mi clase de aguagym; la canción debe de ser un standard del forró porque lo han versioneado unos cuantos, entre ellos, Gusttavo Lima "y" assim você me mata. Aquí la versión del aguagym:



¿Esto en el Rockdelux? Ni de coña. Lo que hay es una reseña del primer disco en solitario de Flávia Muniz, a quien no conocía de nada y eso que, según la reseña, lleva unos cuantos años como integrante del grupo indie Luisa Mandou Um Beijo, que tampoco conocía de nada.



Me gusta mucho más Flávia en solitario. No hace indie sino música popular brasileña de la clásica: lo que llaman por su abreviatura, MPB. Es un disco bem bonitinho, curiosamente publicado por un sello madrileño, y cantado con esa vocecita bem fininha de la que también hacía gala cuando era indie. Assim você me mata...



Y en esto que se me ocurre ver listas de lo mejor de 2012 en Brasil. ¡Y no me he enterado hasta la fecha del nuevo disco de Caetano! ¿Pero qué es esto? (Vale, se publicó el mes pasado en Brasil, poco antes de morir su centenaria madre, pero igualmente.) Aquí un tema del disco: tudo megabom, gigabom, terabom...



Caetano el setentón high-tech figura también como invitado en el nuevo de Bonde do Rolê.



Y otro del que no he oído desde hace un montón también sacó disco el año pasado. Tenía uno en plan electrónico-nordestino que me gustó mucho.



El nuevo es menos electrónico y no me hace tanta gracia.



Y luego anda lo que desconozco. Por ejemplo, mais uma cantora bonitinha:



Y ya que nos ponemos con listas de "lo mejor de 2012": En el Time Out de Barcelona, que ahora viene con El Periódico, escribe Albert Puig sobre la distancia tan infranqueable como impermeable que separa lo mejor según la crítica (los Frank Oceans y Kendrick Lamars del post anterior) de lo mejor según el público (la Adele y el Alborán), concluye que la música popular corre por caminos paralelos que van en direcciones contrarias, y se pregunta qué hay más, si incultura en el oyente de radiofórmula o esnobismo en el crítico de música. Considerando que nos hemos encontrado con aberraciones del tipo triunfitos que no tienen ni repajolera idea de quién es ese Bruce Esprin... como se llame, a una se le ocurre que probablemente haya más esnobismo que incultura, pero por encima de todo, que los caminos paralelos e inencontrables los propician los mismos medios. Ya no se hacen programas de los 40 principales con Perales y Led Zeppelin juntos y revueltos, ni programas de discos dedicados donde pinchaban lo último de los Stones, Manolo Escobar, los Hermanos Anoz y Miriam Makeba, todo en el mismo programa. A continuación, "Estas botas son para caminar". Para Maribel en el día de su cumpleaños, de sus padres y hermanos con mucho cariño.



A tornado flew around my room...

Nos estamos enterando de la magnitud de la tangentopoli española. Qué panda de corruptos tenemos por gobernantes: no sólo en el PP.

La música, por el contrario, nos está dando alegrías. Ha salido el Rockdelux de febrero y hay un artículo sobre la música negra norteamericana actual. Algunos de ellos llegaron a mi vida como un tornado: Frank Ocean (el de la canción del tornado)...



...o THEESatisfaction...



...o Azealia Banks...



...o Janelle, que vendrá en breve con un disco de título pelín hendrixiano...



...y otra serie de gente que no va presumiendo de bling-bling, expresa en sus letras miedos, inseguridades e inquietudes sociales, y algunos de ellos tienen orientación sexual ambigua (los bisexuales Frank Ocean y Azealia; cuentan sobre Janelle, que dice al respecto que sólo sale con androides) o son directamente de la acera de enfrente (THEESatisfaction). Hay alguno que al menos me sonaba, como The Weeknd...



...pero como estoy out, no tengo ni repajolera idea sobre la mayoría de los que nombra el artículo. Como Kendrick Lamar, que le da al hip-hop con miga...



...o Ab-Soul, que dice en una canción que se cree que es Jimi Hendrix y Kurt Cobain, pero que echa de menos una banda de gitanos y quiere que alguien le quite la pistola antes de volarse la tapa de los sesos...



...o Elle Varner, que en la canción que viene no se une a las chicas del pompón sino que mete un violín country en la mezcla.



Y es que envuelven los temas de sus letras en unos soniditos muy curiosos. De eso ha tratado mucha música popular negra americana, con mensaje y sin mensaje: del sonido, los soooooooooooooooooooooundzzzzzzzzzz, ññññññññiiiiiiiiiiiiiiiiiii, zoooooooooooooooooooooooooooooom... Habrá que seguir investigando.