jueves, 17 de febrero de 2011

Lo bueno de los samples...

...es que te muestran cosas desconocidas. Igual que las versiones.

Salió "Let England Shake", el último de PJ Harvey, el día de San Valentín: también en Spotify. Una es fan, o sea, no es objetiva. La PJ me sigue enganchando un montón, digan lo que digan: la han llamado pretenciosa y digamos que frívola por hacer un disco pop (¡conceptual, Dios nos libre!) sobre la guerra, pero también ha recibido flores y venga flores por parte de la crítica (varios 100 sobre 100 en el Metacritic). Alguien decía, y yo tengo la misma impresión, que "Let England Shake" es una especie de mezcla de "To Bring You My Love" (posiblemente su disco más destacado) con "White Chalk" (el anterior a este, donde Polly Jean cuelga la guitarra y prueba registros de voz más agudos). De todos modos, no cabía esperar que volviera a canciones cuyo mensaje parecía ser "fóllame, tengo la regla" o algo así: aquí en Benicàssim.



Pues resulta que esta del último, que tiene un rollo Cocteau Twins a lo tribal...



...lleva un sampleado que resulta ser de un megahit del reggae de 1970, de un tal Niney the Observer (Niney porque perdió un dedo en un accidente), un productor jamaicano en la onda de Lee "Scratch" Perry...



...tema que por lo visto no le hizo maldita la gracia a Bob Marley: Niney se inspiró un poco mucho en esta canción...



Y ya que hablamos de Bob Marley: El periodista musical Nick Kent, en sus memorias de los 70, cuenta una historia: En 1976 estaba en una grabación de Brian Eno con John Cale (y, todo sea dicho, metiéndose por la nariz: el tipo se pasa los 70 metiéndose por la nariz cuando no por la vena) y en esto que va al wáter y se encuentra con una panda de negros fumando un porro tamaño folio que le miran con cara de perro. El otro, rayado como iba y del miedo que tenía, se mete a uno de los wáteres y se mea encima. Sale del cubículo y se le acercan tres de ellos. El del medio, que resulta ser Bob Marley (y el resto de la pandilla, los Wailers), le dedica un insulto. Kent, que nunca antes se había topado con Bob Marley o los Wailers, lo achaca a su propia imagen, demasiado "femenina" (llevaba los ojos pintados, y el atuendo por lo visto acompañaba): y ya hay constancia de lo que se piensa en Jamaica de los homosexuales (Kent no lo es: tuvo una turbulenta relación con Chrissie Hynde antes de ser siquiera Chrissie Hynde su compañera de faenas en el NME, mucho menos Chrissie Hynde la líder de los Pretenders.) La conclusión de Kent: one love, los cojones, hablando mal y en plata.



Aquí Nick Kent hablando de su libro. El cual contiene tanto el lado moralizante que se desprende del vídeo como el cotilleo guarro: sexo, droga y rocanrol, o gonorrea, picaderos and the Wailers. (Y lo de los Wailers no fue nada: cosas peores pasaron.)



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